jueves, 29 de octubre de 2015

¿Qué cuento has leído? El registro del préstamo de aula


Soy bastante contraria al uso de cartillas de lectura porque me parece que van ligadas a un enfoque nada funcional de la lectoescritura. Además he comprobado que los niños acaban aprendiendo a leer igual aun haciéndolo de otros textos mucho más motivadores a pesar de que a veces incluyan letras que "aún no se han dado". Por ello en 4 y 5 años organizamos un préstamo de libros en el que cada niño se lleva un cuento el fin de semana. En ambos cursos es fundamental que se lo lean sus familias y disfruten la historia y el momento tan bonito de la lectura pero en 5 años es importante que empiecen a participar progresivamente de ésta, primero buscando palabras en el texto, después leyendo alguna palabra, más tarde frases o diálogos y al final alguna página completa, siempre alternando con papá o mamá para conseguir terminar la historia y dar sentido a lo que leen.

Para sacar más partido al préstamo y que tengan que recordar y releer el título al devolver el cuento al aula, hacemos un registro. Cada alumno busca en un cuaderno el título del libro que ha leido y anota su nombre en una lista debajo. Después pega una pegatina según si le ha gustado mucho (pegatina verde), poco (amarilla) o nada (roja).  

El cuaderno con los libros lo elaboro yo cada año. En 4 años las páginas se componen de las portadas escaneadas de los cuentos del lote de préstamo y el título en mayúsculas y minúsculas y debajo 20 casillas (tantas como alumnos) para poner los nombres de los niños que vayan leyendo ese cuento.

https://drive.google.com/folderview?id=0B2KNowNDUsorSTNVcjVVNDFqcUE&usp=sharing

https://drive.google.com/folderview?id=0B2KNowNDUsorSTNVcjVVNDFqcUE&usp=sharing

En 5 años cada página tiene nada más el título en mayúsculas y minúsculas y las casillas para los nombres.

https://drive.google.com/folderview?id=0B2KNowNDUsorSTNVcjVVNDFqcUE&usp=sharing

https://drive.google.com/folderview?id=0B2KNowNDUsorSTNVcjVVNDFqcUE&usp=sharing

Podéis descargar plantillas y portadas pinchando aquí o en las imágenes anteriores.

La primera semana todos los niños ponen su nombre en la casilla 1, después en la 2, etc. de tal forma que a medida que avanza el curso les encanta ver quienes ya se han leído el libro que a ellos le ha tocado y si ha gustado o no a otros compañeros.

En 4 años sobre todo se guían por la portada y sólo hacia final de curso analizan con un poco más de detalle el título. Pero en 5 años, al no haber foto, tienen que leer el título y resulta una actividad que les ayuda muchísimo a avanzar en la lectura con sentido. Me parece importante que en el proceso de transformar en fonemas lo que ven escrito busquen trucos para saber qué pone, aunque no puedan traducir toda grafía a su sonido correspondiente porque en ese momento no lo recuerden por no ser tan familiar (por no haberlo dado en Letrilandia, vamos). El conjunto de títulos es algo conocido porque cada semana los voy diciendo al repartirlos por lo que tienen ya una pista de lo que puede poner. Yo luego les insisto en que si han leído El árbol presumido no hace falta que lean todos los títulos completos hasta llegar a ese (que sería costosísimo al principio de 5 años) sino que sólo necesitan detenerse en los que empiecen por "El". Después les pregunto "¿y para que ponga árbol que letra debe venir después?" y ya sabemos que si después de "el" no hay una "a" tampoco será el cuento buscado. Así les facilitamos mucho el proceso, no pierden la motivación y van buscando estrategias para encontrar información escrita en textos.

Además, como hay varios títulos del mismo personaje (por ejemplo, La vaca Sara, La vaca Sara campesina o La vaca Sara y la tormenta de nieve) sí deben prestar atención cuando encuentren el de su personaje y continuar leyendo (o contando el número de palabras, fijándose en las letras que contienen, etc.) para ver si es el que buscan.

Para los alumnos que es muy complicado encontrar el cuento, sobre todo a principio de curso de 5 años, se lo escribo yo en una cuartilla y ellos deben buscar el título que es igual. Poco a poco se van después desprendiendo de este apoyo.

Otra cosa que a mí me encanta de la elaboración del registro es que se ayudan mucho unos niños a otros. El que es más capaz de leer (ayudante) le va leyendo despacio al niño ayudado los títulos incluso dándole explicaciones de por qué puede o no puede ser el suyo. Esto es fundamental en el proceso porque se entienden mucho mejor "de niño a niño".

Respecto a la colocación de pegatinas en función de si les ha gustado mucho, poco o nada el cuento, a mí me parece muy interesante el darles la oportunidad de valorarlos de forma individual y un poco más "privada". Cuando les preguntamos en la asamblea "¿te ha gustado el cuento que te han contado este fin de semana?" me da la impresión de que casi se ven obligados a decir que sí pues es una pregunta muy directa y delante de todos sus compañeros. Al final del curso es interesante hacer una pequeña valoración y ver qué cuentos son los que más/menos nos han gustado. (En la entrada Gráficos de barras: ¿Qué cuentos nos han gustado más? podéis leer cómo lo hago yo en 5 años)


Yo realizo esta actividad en huequitos que vamos teniendo: al entrar a clase mientras nos sentamos en la alfombra, cuando acaban de desayunar, cuando acaban de recoger los rincones pero aún queda un poquito hasta que se van a comer, etc. Las tres o cuatro primeras semanas hay que estar más pendiente de ellos y de encontrar huecos y también tenemos que dedicar más tiempo porque les tenemos que ayudar más a buscar los títulos, a darles trucos, etc., pero luego ya van ellos solos siempre que tienen un ratito. Aunque siempre hay que llamar a 2 ó 3 niños para que busquen su cuento y anoten su nombre y ayudarles más, es una dedicación bastante pequeña de tiempo y esfuerzo por nuestra parte para las ventajas que tiene la actividad.

¡Así que si realizáis préstamos de cuentos os animo a que incorporéis el registro a vuestras rutinas!.

jueves, 15 de octubre de 2015

Empezando a trabajar con regletas


Nunca hasta ahora había usado las regletas en el aula y en esta entrada quiero compartir mis comienzos y daros alguna idea si estáis pensando introducirlas a vuestros alumnos. Yo he empezado principalmente porque este curso con el método de Edelvives de 5 años viene un cuadernillo llamado "Pensar con las manos" para realizarlo tras un trabajo manipulativo previo con las regletas. De primeras pensé "qué bien, una oportunidad para aprender y conocer las posibilidades de este material". Y buscando como iniciar el trabajo con regletas llegué a Tocamates, el blog de Jose Ángel Murcia, que si no lo conocéis os lo recomiendo porque es maravilloso, tanto para infantil como para primaria. 


Me gustó mucho su entrada "Regletas Cuisenaire, la primera vez" y comencé a realizar en la asamblea durante 4 ó 5 ratitos todo lo que ahí propone . ¡A los niños les encantó jugar con ellas y me pedían que las sacara los días que hacíamos otras actividades!. Empezamos conociendo las regletas por su color, después comparando sus tamaños, surgió de ellos ordenarlas formando la escalera, buscamos equivalencias entre regletas, jugamos a averiguar cuál se había comido el dragón comeletras (en este caso el dragón comeregletas) y a identificar regletas sólo con el tacto. 


Además de presentarlas en la asamblea, durante dos o tres semanas las he dejado en el rincón de lógica-matemática para que los niños que lo eligiesen pudiesen jugar con ellas libremente o realizar figuras con plantillas dadas por mí. Repetidamente hacían la escalera con las 10 regletas tanto sobre la mesa tumbada como en altura.


Y también aprovecharon para escribir sus nombres y hacer todo tipo de construcciones, curiosamente, simétricas.


Para poder avanzar con el trabajo de las regletas es necesario pasar después a la asociación de las regletas con la cantidad que representan. Yo no sabía cómo hacerlo de forma que saliese de ellos y no que fuese algo que yo les dijese (la roja es el 2, la naranja es el 10, etc.). Le pregunté a Jose Angel y me sugirió que jugásemos a "¿cuántos pasajeros caben en el tren azul?" siendo los pasajeros las regletas blancas y los trenes el resto de regletas. Me pareció genial y nos pusimos manos a la obra viviendo los mejores momentos de lo que llevamos de curso. En algún momento mi cabeza hizo el cambio de tren por autobús y en la alfombra pintamos una estación de autobuses, con su taquilla, su sala de espera llena de pasajeros, los aparcamientos para los autobuses y un aparcamiento exterior para coches (regletas rojas, que me parecían un poco pequeñas para ser autobuses aunque ahora que lo pienso deberían haber sido minibuses y no incorporar otro vehículo más).

Todo comenzó con "¿con cuántos pasajeros creéis que se llenaría el autobús naranja?" (ellos eligieron el autobús que se iba a ir primero de la estación). Y empezaron a hacer estimaciones. "¡En el naranja cabrán 8!" y el niño que conducía el autobús naranja metía 8 pero dejando huecos entre los pasajeros. Alguien le dijo "¡No, júntalos más!". Entonces les pregunté yo: "¿Creéis que caben más?". "Si los juntamos sí", dijeron. "Y si los juntamos, ¿cuántos más creéis que cabrán?". Averiguamos que en total cabían 10 y el autobús se fue de la estación. Así fuimos haciendo estimaciones de la capacidad de otros autobuses lo cual me gustó porque suelo trabajar poco las estimaciones y me parece fundamental para que luego, ante un problema o una operación, no digan resultados al azar que son imposibles. 


La propuesta fue un éxito rotundo. Tanto les gustó que se dedicaron a dibujar la estación de autobuses con las regletas-autobús en la pizarra. 

Cuando llevábamos dos autobuses, surgió la necesidad de ir apuntando lo que ya sabíamos para poder acercarnos más en las estimaciones para los vehículos que nos quedaban. Además, al no hacer la actividad toda seguida sino en 3 ratitos, necesitábamos recordar los autobuses que ya habíamos llenado.

El último día un alumno preguntó si no había autobuses dobles. Cuando acabamos con los de un piso jugamos un ratito a llenar autobuses de 2 pisos lo que, además de divertirles muchísimo, nos sirvió para sumar 3+3, 4+4...

 








Por último, y ya con idea de hacer las actividades del cuadernillo, ordenamos los autobuses. Ellos enseguida propusieron como criterio de orden la escalera empezando por el coche (el de 2 pasajeros, que corresponde a la regleta roja).


En un congreso que fui una vez dijo un ponente que todo lo que hacemos en el aula no tiene por que ser didácticamente excepcional y maravilloso pero sí tiene que haber cada día un ratito que sea excelente. Esto se me quedó grabadísimo e intento buscar cada día ese ratito educativamente increíble. Durante estos días, esos momenos fueron los que jugamos con las regletas y en concreto con la estación de autobuses. Mil gracias por tu ayuda, Jose Ángel.

Y luego empezamos a hacer el cuadernillo. Y pasó lo que suele pasar cuando se quiere justificar con fichas un trabajo que ya tiene todo su sentido manipulativamente: empezamos a perder muchísimo tiempo en rellenarlas a través unas consignas complicadísimas de seguir sobre un papel. Y perdimos tiempo que iba a estar dedicado a muchas cosas propias de Educación Infantil y que no tienen que ver con fichas. Así que vamos a seguir trabajando con las regletas intentando divertirnos como hasta ahora aunque en el cuadernillo sólo lleven escrito por mí "hecho manipulativamente". ¡Os contaré por aquí si nos vuelven a surgir momentos tan interesantes!

viernes, 2 de octubre de 2015

Trabajando por rincones en Infantil V: programando.

Las entradas más leídas del blog son las que hacen referencia al trabajo por rincones. También son las que más comentarios tienen con muchas preguntas muy interesantes. Voy a preparar una entrada recopilando preguntas y respuestas que habéis dejado en ellas y en los vídeos de You Tube relacionados con el trabajo por rincones, pero mientras tanto he pensado contaros cómo hago yo la programación semanal. Muchos habéis preguntado sobre las sesiones que dedico al trabajo por rincones, cómo elijo las actividades, cuánto tiempo se mantienen, si son compatibles con métodos editoriales o proyectos, etc. Voy a contaros cómo lo hago yo, que como siempre digo no es la mejor manera ni la única sino la que a mi hasta ahora me funciona.

Como ya he contado en alguna otra entrada yo dedico si puedo una sesión al día al trabajo por rincones a partir de octubre aunque algunas fotos que veréis luego son de un curso en el que sólo lo hacía 4 días a la semana. En septiembre no soy tan constante porque me gusta empezar poco a poco, he tenido que rehacer los carnets porque los que tenían en 3 y 4 años estaban muy viejos, han venido alumnos nuevos a los que quería explicar con calma el funcionamiento, etc. Este curso como tengo la mayoría de especialidades en las sesiones antes del recreo, voy a trabajar por rincones en la sesión que hay después del recreo. Es una sesión de 1 hora que se quedará en 45 minutos. Como es poco tiempo dejaré explicadas las actividades en la asamblea de la mañana de forma que al llegar del recreo sólo haya que recordarlas y comenzar a trabajar. 

Lo primero que tengo delante a la hora de programar son dos hojas como las que veis (y que podéis descargar en formato word pinchando en ellas): una de programación por sesiones y otra de programación por rincones, en función de lo que define las filas. En la plantilla de programación por sesiones véis el hueco dedicado al trabajo por rincones (pone "rincones").

https://drive.google.com/drive/u/0/folders/0B2KNowNDUsorLTFXY21SU3FfNk0

https://drive.google.com/drive/u/0/folders/0B2KNowNDUsorLTFXY21SU3FfNk0

Relleno todos los huecos excepto ese en dicha hoja, en la que como veís están los dias de la semana y todas las sesiones de cada día. (La foto es de otro curso distinto al horario de arriba por lo que las especialidades no coinciden).

En el trabajo por rincones necesitamos programar una actividad para cada rincón, algunas cambiarán cada día y otras  se mantendrán toda la semana. Esta programación la hago en la otra plantilla, la de programación por rincones. Aquí podéis ver un ejemplo (los nombres de los rincones han salido cortados pero los podéis ver con la foto de la plantilla vacía).


Ambas plantillas rellenas las dejo colgadas en mi armario para verlas en todo momento. Cuando llega la sesión de trabajo por rincones miro la hoja de programación de los rincones.

Como veís en la programación por sesiones, en la sesión que pone "rincones" anoto lo que vamos a hacer en el rincón de lectoescritura porque por desgracia son las fichas lo que tengo que hacer por obligación y marcan el ritmo del aula y quiero tenerlas presentes junto a toda la programación de la semana para ver todas las que me da tiempo hacer (en fin...).

En cuanto a la selección de actividades para los rincones estará guiada por los objetivos de la unidad didáctica o del proyecto que estemos trabajando, por lo tanto trabajar por rincones es perfectamente compatible con ambas metodologías. Yo lo que hago es elegir con mi compañera de nivel las actividades que vamos a hacer esa semana y luego ubico en los rincones las que son más adecuadas para hacer en ellos. En el rincón de lectoescritura cambio de actividad cada día y en el resto suelo mantenerla toda la semana.

- Como ya os he dicho, en mi cole tenemos muchos libros así que en el rincón de lectoescritura suelo hacer fichas de la unidad diáctica que estamos trabajando, bien del método o bien de letrilandia.
- En el rincón de matemáticas es en el que hago las actividades que soléis ver por el blog. Este año quiero aprender a usar bien las regletas así que de momento se las he dejado en este rincón para que las manipulen libremente. Poco a poco iremos haciendo actividades más complejas con ellas. 


- El rincón de arte me encanta y lo suelo dedicar a actividades creativas y con técnicas chulas que tienen que ver con la unidad didáctica o con la estación del año en la que estemos. Veremos a ver qué podemos hacer este año.



- Al rincón de biblioteca normalmente van a leer cuentos, a jugar con las palabras nuevas y a escribir en la pizarra.



- En el rincón de juego simbólico normalmente está montada siempre la casita y si es posible añado o quito juguetes en función de la unidad didáctica. Por ejemplo, ahora mismo estamos trabajando la prehistoria y con papel continuo he montado una cueva. Cuando trabajamos las profesiones intento ir dejando material de médicos, peluqueros, mecánicos, etc.
- En el rincón de construcciones juegan con materiales que puedan incitar a construir algo relacionado con los contenidos que estemos trabajando. por ejemplo, si estamos trabajando la familia y la casa les dejo las construcciones de madera y las familias de juguete.
- El rincón de ciencias no siempre lo consigo relacionar con la unidad trabajada aunque sí intento que las propuestas vayan encaminadas a conseguir los objetivos del curso. Actividades que me encantan son las de medir con palmos y pies y después pasar al metro o los distintos experimentos con agua. Este curso tampoco he podido de momento poner este rincón por el tamaño del aula.

domingo, 20 de septiembre de 2015

Oportunidades para aprender matemáticas a lo largo de una jornada en el segundo ciclo de Educación Infantil

En esta entrada simplemente quiero compartir un trabajo que para mi es muy especial. Hace ya más de un año me invitaron a la Universidad Autónoma de Madrid a contar a las alumnas del grado de Educación Infantil cómo trabajo yo las matemáticas en mi aula (hablé de ello en la entrada Aprendizaje incidental y aprendizaje programado de las matemáticas en el aula). Fue una experiencia tan tan positiva para todos que Carlos me animó a escribir con un poquito más de "forma" todo lo que hablamos y publicarlo para que más maestras pudieran acceder a ello. Y surgió un artículo que para mi es precioso porque, dejando a un lado lo que aporte matemáticamente, refleja bastante bien la complejidad de nuestro trabajo. Tengo amigos que aún no saben muy bien qué estudiamos y qué hacemos después las maestras de Educación Infantil. Entre otras miles de cosas, convertimos la vida cotidiana del aula, los juegos, las rutinas,... en experiencias de aprendizaje; observamos a los niños en ellas y desde ahí diseñamos actividades más específicas para incidir en objetivos concretos. Y todo ello a veces incluso lidiando con las exigencias del centro, encaminadas a usar más y más libros y a reproducir esquemas de aprendizaje bastante anticuados.

http://www.sinewton.org/numeros/numeros/89/Experaula.pdf

De ese tipo de enseñanza-aprendizaje, por un lado aprovechando la cotidianeidad de nuestra clase y por otro planificado especificamente, habla el artículo Oportunidades para aprender matemáticas a lo largo de una jornada en el segundo ciclo de Educación Infantil. Fué publicado por la revista Números dentro de la sección Experiencias de Aula en el volúmen 89 de Julio 2015.  Podéis leerlo pinchando en el título o en las imagenes.

http://www.sinewton.org/numeros/numeros/89/Experaula.pdf

El artículo comienza contando cómo veo yo la situación de la enseñanza de las matemáticas en la Educación Infantil. Después habla de cómo debe ser ésta de acuerdo con un documento de la National Association for the Education of Young Children (Asociación Nacional para la Educación Infantil, NAEYC) y el National Council of Teachers of Mathematics (Consejo Nacional de Profesores de Matemáticas, NCTM) llamado Matemáticas en la Educación Infantil: Facilitando un buen inicio. declaración conjunta de posición. Es un texto muy sencillo y práctico que podéis leer pinchando en el título.

En el tercer apartado visitamos un aula de Educación Infantil, primero pedagógicamente, es decir, hablando de cómo aprenden los niños del segundo ciclo de esta etapa; y después, físicamente, acercándonos a un clase real. Luego, en el cuarto epígrafe y teniendo en cuenta todo lo anterior, voy repasando una jornada-tipo para analizar lo que nos ofrece cada momento para enseñar matemáticas. Por un lado, aprovechando momentos cotidianos como el desayuno o aquellos en los que las actividades no tienen como objetivo principal uno de tipo matemático; y por otro, desde la planificación específica para que los alumnos adquieran conocimientos de esta disciplina.

http://www.sinewton.org/numeros/numeros/89/Experaula.pdf

Y a modo de conclusión, hago una pequeña reflexión sobre cómo pueden trabajar las matemáticas dentro del seno familiar conociendo el enfoque que les damos en el aula.

Antes de terminar tengo que agradecer a Olga su tradución al inglés del resumen del principio. Sin conocerme de nada no te importó ayudarme. En ese momento debiste pensar que estaba loca, jaja. Muchas gracias.

Pues nada, espero que os guste muchísimo. A mí misma me viene bien releerlo para no olvidarme, dentro de lo rápido que pasamos cada momento del día, de pararme a disfrutar algunos instantes y sacarles todo el partido posible.

viernes, 11 de septiembre de 2015

El Dragón Comeletras

En esta entrada voy a compartir un juego muy sencillo que encanta a los niños de mi clase y que yo disfruto mucho también jugando con ellos. Seguro que muchos de vosotros ya lo hacéis en vuestras clases aunque no lo llaméis así. Para los que no lo conozcais, ¡os lo recomiendo!.

Como su nombre indica, el Dragón Comeletras lo que hace es comer letras. Cuando va creciendo, como necesita más alimento, también come palabras y sílabas. Cuando en 3 años mis alumnos conocen algunas letras (vocales y alguna consonante de sus nombres) las escribimos en la pizarra pequeñita que tenemos en la asamblea. Como mucho escribimos (entre los niños y yo según su competencia en la tarea) a la vez 5 o 6 y en mayúsculas. Y cuando ya las tenemos...¡por la esquina de la pizarra aparece el dragón con la boca abierta y sus colmillos o incluso echando fuego! Los niños se tapan los ojos, el dragón avanza con pisadas fuertes (que hacemos nosotros) y cuando se asegura de que nadie le ve...¡ñam, ñam! se come una letra (y nosotros la borramos de la pizarra). Cuando los niños oyen el sonido del dragón masticando ya pueden abrir los ojos. El juego consiste en adivinar qué letra se ha comido el dragón. Luego la volvemos a escribir y volvemos a taparnos los ojos porque el dragón va a volver.


















Es sencillísimo pero no os podéis imaginar lo que les gusta cerrar los ojos, oír las pisadas de dragón y luego adivinar la letra. Yo suelo cambiar de actividad cuando hemos jugado 5 o 6 veces para que se queden con ganas de más pero ellos podrían seguir y seguir porque les encanta.

Cuando en 3 años ya reconocen alguna palabra de forma global o pueden saber qué pone por la letra que empieza o las que contiene, el dragón de vez en cuando come palabras en mayúsculas. Escribo 3 palabras que hayamos trabajado (como por ejemplo casa, mamá y oso) y jugamos del mismo modo. Cuando jugamos con palabras, mientras las escribimos es importante hablar de sus características: las letras que tienen, si aparece la "O" o no (suele ser un rasgo distintivo importante en 3 años), etc. Y luego hacer un pequeño análisis de cómo podemos saber la que se ha comido. 


Para mi es fundamental en la enseñanza y aprendizaje de la lectoescritura enseñar "trucos" para saber qué puede poner aún sin saber leer. Creo que es muy motivador, les enseña a pensar sobre las palabras y el lenguaje, conduce a una lectura más comprensiva y además contribuye a que menos alumnos se queden atrás en el proceso. Cuando bastantes niños son capaces de leer, a los que aún no saben les motiva mucho poder decir qué pone gracias a alguna estrategia de reconocimiento que han aprendido porque sienten que saben más de lo que pensaban.

Cuando empezamos a conocer el abecedario en minúsculas añadimos al juego este tipo de letras (en ocasiones jugamos sólo con vocales en mayúsculas para que todos los alumnos participen aunque vayan algo más retrasados) y posteriormente palabras en minúsculas cuando van aprendiendo a leerlas. 


En 5 años, una vez que hemos avanzado un poco con el trabajo más sistemático de la lectoescritura a través de los libros que usamos en mi cole, empleamos en el juego también las sílabas en minúsculas. Y por supuesto siempre repasamos lo anterior (letras en mayúsculas, palabras en mayúsculas y palabras sencillas en minúsculas).

Además de trabajar aspectos relacionados con la identificación de letras y palabras y la lectura es un juego maravilloso para mejorar la atención y la concentración de los alumnos. Para los que no lo conociais, espero que os haya gustado y os funcione tan bien como a mí.

jueves, 3 de septiembre de 2015

Cenefas con series para decorar la clase



En esta entrada os voy a enseñar una actividad que yo creo que es ideal para los primeros días de curso. Consiste en realizar cenefas para decorar el aula mediante la repetición de un patrón.

En mi cole cambiamos de clase cada año y cuando llegué a la que me tocó el año pasado me encontré muy deteriorados los marcos de las ventanas que dan al pasillo y bastante sucias las paredes. Las primeras semanas de curso realizamos cenefas con series. Así solucionaba estos problemillas que tenía mi clase y preparaba a los niños para una actividad que íbamos a realizar en el rincón de lógica-matemática días después también sobre series. El resultado fue maravilloso, no sólo a nivel decorativo sino en cuanto al desarrollo de la actividad con los alumnos. 
Yo hice las cenefas con mis alumnos de 4 años en el tiempo de juego por equipos. Tengo dividido el grupo en 4 equipos y cada uno iba realizando la actividad un día a la semana durante una sesión de unos 20 minutos o media hora.

Primero corté un trozo de papel continuo como de metro y medio de largo y lo dividí en tiras de unos 10 cm de ancho. Usé este ancho porque iba a hacer las series de las cenefas estampando con esponjas y tenía que caber el dibujo en el ancho de la tira. El largo también lo elegí en función del espacio que quería tapar y de la longitud de dos mesas unidas, para que a los niños les fuese cómodo trabajar.

Los niños trabajaron en equipos pero dentro del equipo les subdividí en parejas y si eran impares, algún niño repetía después con otra pareja. 


A cada pareja les asignaba un patrón con dos motivos diferentes (por ejemplo, corazón verde, estrella morada). Les comenzaba yo la serie estampando el patrón, después cada niño elegía el motivo que prefería, estaba presente mientras hacían una o dos repeticiones del patrón y continuaban ellos la serie hasta terminar la tira.  Normalmente cada pareja hacía dos tiras, una con patrón AB (por ejemplo, corazón verde, estrella morada) 


y otra con patrón ABB o AAB (por ejemplo, corazón morado, 2 margaritas rojas o 2 tulipanes rojos, una estrella morada). Cuando se secaban, dibujaban en el centro de las margaritas un punto amarillo o naranja también formando una serie por repetición del patrón AB.


Comenzamos con series sencillas porque era el principio de curso de 4 años y hacerlas en parejas y en tamaño grande era algo novedoso para ellos (que siempre habían trabajado las series individualmente en tamaño A4). Resultó una experiencia muy bonita sobre todo por la ayuda que se prestaron dentro de las parejas: “¡venga, que ahora toca corazón rojo!”, “¡no, que tienes que poner dos veces!”. Otra cosa que me encantó es que se concentraron muchísimo en “no perderse” y fallar. Mientras hacían su tira si hablaban sólo era para establecer los turnos y ni siquiera prestaron atención a los niños que estaban jugando en la casita justo al lado. A veces cuando trabajamos por equipos o por rincones hay maestras que creen que eso dificulta su concentración o que no les enseña a trabajar en silencio. Esto prueba una vez más que ambas cosas no son incompatibles siempre que la actividad sea suficientemente interesante para los alumnos.

Y matemáticamente supuso un avance enorme para algunos niños que solos eran incapaces de reconocer un patrón y repetirlo. Emparejándoles con alumnos que les podían ayudar consiguieron entender mejor lo que había que hacer y esto se notó cuando después hicieron series individualmente.

El resultado es el que veis. Nos quedó muy bonito el mural para colgar los dibujos de la figura humana y la ventana. 

 
Para alumnos de 5 años podéis complicar los patrones mucho más, tanto trabajando por parejas y repitiendo dos elementos (AABB, ABBB o AAAB) como en tríos con tres elementos (ABC, AABC, etc.) o participando un grupo de cuatro niños en una cenefa de 4 elementos (ABCD).

Si no tenéis esponjas de estampar ya hechas y no tenéis tiempo para hacerlas vosotros podéis estampar las bases de figuras de construcción o de envases de distinta forma o incluso hacer las cenefas pegando pegatinas, gomets grandes o figuras geométricas previamente recortadas de cartulinas o folios de colores.

¡Es una actividad muy sencilla para comenzar el curso y espero que la disfrutéis mucho!

sábado, 29 de agosto de 2015

¿Guardería o Escuela Infantil?


¡Ya estamos de vuelta de las vacaciones! La primera entrada iba a ser otra pero hace unos días abrí la propaganda de la vuelta al cole de El Corte Inglés y cuando llegué a las páginas que veis en las fotos dije "no pasa de esta semana que escriba algo sobre la vuelta a la ´guarde´". Y es que la mayoría de los niños de 0 a 3 años por suerte ya no van a la "guarde". Van a escuelas infantiles porque desde hace tiempo se sabe que los 3 primeros años de vida son determinantes para la formación y que por tanto no podemos tener a los niños "guardados". Hay mucho potencial educativo en los momentos de aseo, comida, descanso y por supuesto en el juego entre y durante esos cuidados. 

Por eso en las escuelas infantiles hay maestras que han estudiado Educación Infantil, la misma carrera que para trabajar con niños de 3 a 6 años (y en algunas han accedido por la misma oposición). Y no porque se necesite formación universitaria para cambiar pañales o dar de comer a bebés sino porque, por un lado, hay que ser conscientes de porqué es determinante para un bebé mirarle, hablarle o acariciarle mientras se le cambian los pañales o se le enseña a comer. Y por otro, hay que conocer muy bien la evolución de un niño de estas edades (que es de las más rápidas y complejas que se producirán en toda su vida) para proporcionar una estimulación ajustada.

En realidad, no es algo complicadísimo y de hecho a la clase de 3 años llegan alumnos que no han pasado por escuelas infantiles y no se nota la diferencia con un niño que sí ha ido. En mi opinión con quien mejor está un bebé hasta los 3 años es con sus padres o en su defecto con los abuelos. Con ellos no hay casi riesgo de que simplemente "se les guarde" y casi todos los padres o abuelos que tienen tiempo de estar con un niño identificarán cuando deben alimentarle, dormirle, asearle y si están atentos, hasta sabrán que juegos demanda en cada momento. Pero como esto no siempre es posible, entre alguna otra opción, están las escuelas infantiles.

Hay guarderías que se llaman a ellas mismas así (y por tanto no dejan duda a lo que se dedican). Hay también algunas escuelas infantiles que en realidad son guarderías. Pero la mayoría de escuelas infantiles son escuelas para atender la formación de una etapa determinante, con un curriculo específico y una legislación que regula la formación de las personas que trabajan allí, las instalaciones, los horarios, etc. Como son cosas radicalmente diferentes, vamos a llamar a cada cosa por su nombre y a no desprestigiar los cuidados y formación que damos a nuestros hijos y la función tan importante de la institución y las personas que trabajan en ella. 


Ahora que Pablo va a comenzar a ir a la escuela infantil, he podido comprobar que la mayoría de la gente usa "guarde" o guardería (y no sé si saben a qué me refiero cuando digo escuela infantil) y contados maestros emplean el término escuela infantil y comprenden que denominamos con él. De la sociedad en general puedo entender que ni siquiera se sepa la diferencia y por tanto se use un término incorrecto. Pero las familias que llevamos a nuestros hijos a las escuelas y por supuesto los maestros, creo que deberíamos hacer todo lo posible porque cuando llegue septiembre predomine "escuela infantil" en el lenguaje de la calle, dejando "guardería" relegado a los contados sitios que de verdad lo son. Ojalá defendamos entre todos esta etapa tan importante y nuestra propia profesión y dentro de unos años en el folleto de la vuelta al cole ya no leamos eso de "vuelta a la guarde".